En pleno centro de la ciudad monumental de Úbeda y bajo el mágico encuadre que brinda el Hotel MS Palacio de Úbeda 5* GL encontramos, en la cocina de Restaurante Alicún, a Pedro Hervás, un jiennense criado bajo las faldas del maestro cocinero Manolo de la Osa y cuya esencia lleva grabada a fuego en su alma y en su forma de trabajar.
Pedro es un chef incombustible, inquieto y creativo que, desde nuestra primera visita, hace ya más de un año, supo transmitirnos lo que siente cuando cada mañana enciende los fuegos de su restaurante.
Una cena aquella de la que aún hoy tenemos recuerdos memorables, porque apenas hay en Jaén lugares que ofrezcan lo que él pone en el plato: elegancia.
Pura fantasía en el paladar y en el ambiente, porque si aún no conocéis Alicún os estáis perdiendo, sin duda alguna, uno de los lugares con más encanto de nuestra provincia y, nos atrevemos a decir, de Andalucía.
Pero dejando a un lado el atrezzo centrémonos en lo que realmente buscamos (y aquí encontramos) cuando salimos a comer:
Con una carta de vinos llena de referencias de primer nivel, Pedro sitúa su bodega en lo más alto del podio, caldos escogidos a conciencia para maridar de forma impecable con su cocina, sabrosa y llena de productos jiennenses a los que sabe dar ese toque único inculcado por su gran mentor, ducho en guisos y cocciones perfectas.
Un buen cocinero nunca debe olvidar de donde viene, su aprendizaje y como trasladarlo a su cocina actual, él hace eso en Úbeda, cocina sin complejos y sin fanfarrias, cocina elegante y sincera que debe ocupar, más pronto que tarde, el lugar que se merece en el circulo gastronómico actual.
La gastronomía jiennense comienza a asomar la cabeza tímidamente entre las grandes cocinas de nuestro país y sin duda el buen hacer de Pedro Hervás puede llegar a ser uno de los buques insignia que nos defina y diferencie del resto.
Visitad Úbeda, pasead por la Calle Real y descubrid ese rinconcito dedicado solo al disfrute, una experiencia que merece ser compartida y divulgada porque solamente nosotros podemos hacer grande lo nuestro.